RAP VS RACISMO 2011

 

Por supuesto, el título pretende ser una ironía. Y lo primero que debo decir es que yo soy español; y espero que nadie considere esto un ataque personal, es sólo un análisis subjetivo.
Hay países o pueblos a los que se conoce en sus museos, en el arte, en la calle, en la ciencia, en el campo, en la guerra o en su relación con la naturaleza.
A España y su gente se la conoce en los bares. Es una triste realidad, pero es así. Yo no tengo la culpa. Pues bien, aunque no sea un experto, sí conozco ese mundo, al menos un poco. Y por eso me río cuando alguien me dice, rojo de ira, que España, nuestro gran país, aquél por el que mataría, no es racista.
Pues, lamentándolo mucho, no es así. Somos un país racista, y eso no significa que tengamos que ir por ahí pegando a personas de otras razas: basta con no recibirlos bien, con mirarles con desprecio, con creer que no harán nada mejor que nosotros...
Así es: ni sudamericanos, ni africanos, ni chinos. Ninguno se libra. Nos basta con criticar todo aquello que hacen, sin preguntarnos el por qué. ¿Por qué se van de su país a otro extraño? ¿Por qué algunos se emborrachan día sí y día también hasta perder la cabeza? ¿Por qué cobran menos por hora trabajada? ¿Por qué aceptan hacerlo sin contrato? ¿Y todavía tienen que aguantar las impertinencias de cuatro que se escudan en la patria y lo que ésta significa?
Pero no pensamos en cuando el pueblo español tuvo que emigrar al norte de Europa o a América. Y no pensamos que muchos de los que vienen no tienen nada que perder, y sí muchas necesidades. Y que están solos, y echan de menos a la familia, y sólo se relacionan con personas de su cultura porque nosotros les damos la espalda y ellos necesitan un recuerdo al que aferrarse.
Por supuesto, esto es sólo una visión general y, sobre todo, subjetiva de lo que pasa. Al fin y al cabo, es lo que uno ve. Pero, como digo, a España se la conoce en los bares; y no hay un sólo bar en el que no se haga un comentario racista cada día. Es lo que hay.
Por supuesto, ahora cada uno piensa en sí mismo y dice: "Pues yo no soy racista". Yo no digo que todos los españoles somos racistas, que no lo somos; pero quizá sí como grupo. De todas formas, ya lo he dicho antes: esto es sólo una opinión.